Mujer guitarra y batalla
alma tonada y bondad
tu canto urbano,
de cerros, desiertos
y playa
en tu voz particular
es como el mapuche lamento;
que va desde el alba y el campo:
martillando conciencias tu canto,
martillando va.
Tu reclamo dignifica
el día a día en la lucha
por la “Mejora” Social
floreciendo con tu canto
lo acrecienta tu vihuela:
y en larga y angosta faja
ese “Gracias a la vida”
es tu legado, Violeta.
Dejaste olor a uvas
al transitar nuestra tierra
a sandías y a melón
empanadas en horno de barro
arpilleras y canción…
…a chicha dulce y a vida
a pisco, azúcar, limón
tu verso puro es metralla;
tu fusil, el corazón.
LLEGABAS PARA QUEDARTE
Sabiduría del campo
que en susurros me llega
maestría de acordes
dulce en melancolías.
Atraviesas los bosques
caminas la arena
y tu impronta Violeta
el mar no la borra.
Tu semilla de nueces
es árbol, papel y madera
pilar que en la hoguera
calienta la casa
hierve y tetera
empuja emociones
y nutre la mesa.
Adornan jardines
violetas salvajes
la flor del maíz
se inclina a tu paso
y yo repitiendo
canciones de cuarzo
pedazos de luna
ecos de topacio.
Yo quiero dejar
constancia en mi ocaso:
Sin tregua fue tu lucha
y no puede acabarse.
Derechos Reservados © Jaime León Cuadra
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